Limpieza y mantenimiento de las superficies
de acero inoxidable
11 October 2016
Desde siempre, el acero inoxidable realza y acentúa los reflejos cromáticos de los productos Glem, donando un toque de brillo al ambiente de la cocina.
Cuando se trata de diseño y resistencia, el acero inoxidable es uno de los materiales más populares dentro a nuestras cocinas; por esto es muy importante saber cómo cuidar su superficie utilizando algunos consejos útiles y prácticos para asegurarnos de que esté siempre vivo, vigoroso y brillante como el primer día.
CONSEJOS
1. Evitar que soluciones salinas se sequen o permanezcan estancadas en la superficie, ya que puede dar lugar a fenómenos de corrosión.
2. Evitar el contacto prolongado con el material ferroso (lana de acero, tenedores, cucharones, raspadores, etc.) para no causar corrosión a través de la contaminación por partículas ferrosas llevadas en circulación.
3. Limpiar a fondo las superficies de acero inoxidable con un paño húmedo (por ejemplo de microfibra), agua jabonosa y detergentes no abrasivos o clorados.
4. Frotar en la dirección del grano en caso de acero satinado.
5. Enjuagar bien y secar completamente.
6. Utilizar sólo productos específicos para la limpieza del acero inoxidable. Recomendamos utilizar productos comerciales a emulsión.
CÓMO LIMPIAR…
Incrustaciones de cal
Usar una crema detergente multiuso con un paño suave (por ejemplo de microfibra). También se puede utilizar vinagre blanco, posiblemente caliente, frotando con un paño suave (por ejemplo de microfibra), luego enjuagar bien y secar.
Manchas de aceite y de grasa
Utilizar un producto detergente suave para platos o un detergente suave en agua muy caliente. Enjuagar bien con agua limpia y secar con un paño suave (por ejemplo de microfibra). Para las manchas más obstinadas se puede utilizar alcohol etílico o vinagre blanco.
Huellas
Usar un detergente suave o líquido para lavar platos en agua o, alternativamente, frotar con delicadeza utilizando un paño suave (por ejemplo de microfibra) y un limpiador de cristales.
Aureolas de fuego
Usar un paño suave (por ejemplo de microfibra) con una crema limpiadora multiusos para la limpieza doméstica. Enjuagar bien con agua corriente y secar con un paño suave (por ejemplo de microfibra).
Manchas de café o té, suciedad obstinada, grasa quemada
Usar un paño suave (por ejemplo de microfibra) con un detergente específico para la limpieza del acero inoxidable. Recordamos que es necesario retirar inmediatamente líquidos y alimentos de las superficies de acero inoxidable.
Adhesivos, manchas de pegamento
Según la sustancia adhesiva, los residuos pueden eliminarse con agua, disolventes alcohólicos o acetona que, como se sabe, no afectará el acero inoxidable.
Manchas de herrumbre (contaminación)
Las manchas de herrumbre puede que no provengan de la corrosión del acero inoxidable, sino más bien de:
• Artículos (tarros, herramientas de uso diario, etc.) de acero común que pueden transferir partículas ferrosas si son abandonados durante tiempo en la superficie inoxidable.
• El uso de productos agresivos para la limpieza del acero inoxidable.
• Residuos ferrosos llevados en circulación por las campanas de aspiración colocadas sobre los equipos.
• El contacto directo con productos ácidos, alcalinos o amoniaco, o con los vapores emanados por ellos.
• El contacto con paños, esponjas o demás, que se utilizan para la limpieza de otros objetos o de otros materiales.
Para eliminar estas manchas, aplicar un agente de limpieza en crema mediante un paño suave humedecido (por ejemplo de microfibra) y frotar con delicadeza.
En cambio si la herrumbre ya estaba presente, será necesario cubrir la parte afectada con una mezcla de limón y sal y dejar reposar durante unos minutos. En poco tiempo, la herrumbre se desprenderá gracias al ácido del limón y se podrá quitar con una esponja suave.
La herrumbre que se desprenderá probablemente habrá abollado el metal en el cual puede haber dejado pequeñas cavidades.
RECORDAR: es buena práctica probar nuevos productos para la limpieza de piezas de acero inoxidable en zonas donde no se vea y luego esperar unas horas para evaluar su efecto.